TRANSFORMERS: LA ERA DE LA EXTINCIÓN. SINOPSIS CRÍTICA



Las malas críticas que había de ‘Transformers: La Era de la Extinción’ sí tenían su sustento.  Los que esperaban que esta película fuera un buen reinicio para una nueva trilogía quedarán decepcionados, y en gran parte por la gran violación de los cánones de la saga original.  Podría decir que esta película es igual de mala a la segunda de la anterior trilogía.  Pero mientras la recaudación de taquilla sea buena, Michael Bay tendrá licencia para matar progresivamente y a su antojo la esencia de los Transformers.  A continuación, mi acostumbrada sinopsis crítica.


SINOPSIS CRÍTICA

Con ‘Transformers: La Era de Extinción’ se ha empezado con el pie izquierdo una nueva trilogía.  Excesivas y ruidosas escenas de acción, junto con sacrilegios cometidos en contra de la esencia del canon original de los Transformers dejarán insatisfechos a los espectadores, en especial a los seguidores de la famosa serie original.



El Argumento

Resumen de la trama: Han transcurrido tres años desde la destrucción de Chicago.  El gobierno de Estados Unidos ha roto su alianza con los autobots, por considerar que la presencia de éstos ha puesto en peligro a la Tierra reiteradamente.  Pero una conspiración entre de la CIA y la corporación privada KSI, en alianza con el Transformer Lockdown (el cual no es ni autobot ni decepticon) está persiguiendo a los autobots sobrevivientes para eliminarlos y usar sus restos para desarrollar la tecnología con la cual los humanos pueden construir sus propios Transformers.  Lockdown, quien ha sido enviado por los creadores de los Transformers (¿Los Quintessons?) ,aprovecha esta alianza para poder encontrar y atrapar a Optimus Prime. El líder de los autobots ha logrado permanecer oculto, pero termina en una especie de estado catatónico, hasta que un quebrado ingeniero inventor especialista en robótica, Cade Yaeger, lo encuentra pensando que se trata de un camión viejo cuyas partes puede usar para sus inventos.  Pero sin querer, Cade despierta a Optimus y termina en medio de la persecución de Lockdown y la CIA.  Cade Yeager descubrirá que no solo su vida y la de su hija están en peligro, sino la de toda la raza humana, por lo que decide ayudar a Optimus y los autobots…

Lo que más critico de este argumento no es su estructura como tal, sino la inapropiada tergiversación de lo que es la esencia de los Transformers.  Incluso, se le reconoce a Michael Bay que en esta secuela haya dejado a un lado las escenas con chistes pendejos.  El problema es que cometió violaciones garrafales al canon original, los cuales a mi parecer son los siguientes (atención, spoilers):


Galvatron termina siendo una creación de la compañía de tecnología KSI.  Este es quizás el peor defecto argumental de todos.  Los seguidores de la franquicia sabemos que Galvatron surgió cuando un moribundo Megatron hace un pacto con el gigantesco Unicron, por lo cual Unicron le repara y perfecciona su cuerpo, convirtiéndolo en Galvatron.  Y como si esta pifia no fuera suficiente, el rol del resucitado líder de los Decepticons es casi intrascendente.


La compañía KSI descubre la tecnología para fabricar sus propios Transformers.  Este absurdo se fundamenta en el hecho de que en la película se descubre las propiedades del metal “transformio”, material del que están hechos los Transformers.  La capacidad para lograr la aplicación práctica de este conocimiento tendría sentido en una civilización humana que existiera, por poner un ejemplo, dentro de unos 100 años en el futuro.  Los Transformers son creaciones alienígenas muy avanzadas (ahí radica su principal atractivo), y los conocimientos científicos humanos actuales no dan para tanto.  Y para terminar de mancillar el argumento, los Transformers creados por KSI tienen una transformación más sofisticada que los originales.


Ahora, no todo es malo en esta película.  Le abono a Michael Bay que esta vez no haya puesto escenas de chistes tontarrones.  Sí hay escenas de humor, pero son pocas y no rayan en el ridículo.


Estas naves no pertenecen a los Decepticons, como se creía en un principio.  Son en realidad las naves de los creadores de los Transformers (conocidos en la serie original como los "Quintessons"), los cuales invaden la Tierra causando la extinción de los dinosaurios hace 65 millones de años.




Los Elementos Estéticos

No hay que negar que los efectos especiales están bien realizados, pero se les pasó la mano con las excesivas secuencias de acción y destrucción, que hacen que la película se vuelva para el final tediosa y ruidosa.



Los Personajes

Desde el punto de vista actoral, no hay mucho que destacar, las caracterizaciones de los Transformers son básicas, a excepción de Lockdown, un villano en verdad interesante.  Por el lado de los humanos, ninguno sobresale, si acaso se puede decir que los papeles de Stanley Tucci (Yoshua Joyce, el director general y propietario de KSI) y Mark Wahlberg (Cade Yeager, el quebrado ingeniero que encuentra a Optimus) son apenas suficientes.

 
Una de las pocas cosas que me gustaron de la película es el villano Lockdown, un personaje bastante interesante por tres motivos: no pertenece al bando de los Autobots, pero tampoco a los Decepticons; es un enviado de los Quintessons (por llamarlos de alguna manera) para capturar y/o destruir a Optimus Prime; y se trata de un villano imponente, frío y calculador.  Es el transformer con mejor personalidad en esta película.



Conclusión:

Lamentablemente, esta película no cumplió con mis expectativas (a excepción de unas pocas secuencias), y es igual de mala que “La Venganza de los Caídos”, la segunda película de la anterior trilogía.  Esta nueva trilogía ha empezado con el pie izquierdo, y tengo la duda de comprar esta película cuando llegue el DVD (a lo mejor lo termino comprando, para no tener incompleta mi colección de películas de Transformers, de las cuales siempre atesoraré la primera que se estrenó en 2007).



Calificación: 5/10


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