EL REMAKE DE TOTAL RECALL (EL VENGADOR DEL FUTURO): ANÁLISIS CRÍTICO DE LA PELÍCULA

Ya retomando las publicaciones en este blog, tras el click podrán ver mis apreciaciones (con pocos spoilers) sobre la nueva versión de Total Recall, la cual fue dirigida por Len Wiseman, y protagonizada por Colin Farrell, Kate Beckinsale, Jessica Biel y Bryan Cranston.  Esta es la primera película importante de la temporada baja cinematográfica, la cual va hasta finales de noviembre de este año.  Faltan otros estrenos relevantes, como Dredd y Resident Evil Retribution, los cuales serán las últimas escalas para llegar a El Hobbit, la película más esperada del año…

Total Recall es una película bien realizada a nivel técnico, pero con una carencia de emoción, y un argumento predecible, debido a su inevitable similitud con su predecesora de 1990, la cual muchos ya han visto.  Tiene ciertos elementos en su trama que la diferencian de la película que protagonizó en 1990 Arnold Schwarzenegger y que son más fieles al libro de Phillip Dick (We can remember it for you wholesale).  Lo que salva a esta película son las escenas de acción, y una buena recreación de una típica sociedad del futuro que ha superado un apocalipsis bélico, los cuales ayudan a mantener el interés en una trama que si bien no es mala, tampoco genera entusiasmo.  En conclusión, se trata de una película aceptable, para pasar un buen rato…

Douglas Quaid, o su verdadera identidad Carl Hauser (Colin Farrell) al lado de Melina (Jessica Biel), en uno de sus múltiples intentos de escapar de las fuerzas de seguridad de la FUB.

El argumento se desarrolla en un futuro en el cual la civilización humana logra sobrevivir a una guerra mundial química, la cual devasta la mayor parte del planeta, haciéndolo casi inhabitable.  Sólo existen dos naciones: la Federación Unida de Bretaña (FUB), ubicada en lo que hoy es Inglaterra y el norte de Francia; y La Colonia, ubicada en lo que hoy es Australia.  Como la mayor parte de la superficie del planeta está cubierta de gases tóxicos producto de la mencionada guerra, estos territorios están comunicados por un gigantesco sistema de transporte subterráneo, llamado La Caída, el cual pasa cerca del núcleo de La Tierra.  La Caída es el símbolo de la opresión política y económica que la FUB ejerce sobre La Colonia.  Dentro de esta coyuntura, Douglas Quaid (Colin Farrel), un obrero de fábrica, termina descubriendo que su vida sólo son recuerdos implantados tras haber ido a un sitio clandestino conocido como Rekall y que es en realidad un doble agente, pero no sabe si está del lado de la FUB o de La Colonia…

LO QUE ME GUSTÓ

En esta escena, Quaid / Hauser va en busca de "Rekall", un sitio en donde se implantan recuerdos deseados para sus clientes.  Su rutinaria vida como obrero de fabrica lo ha tentado a acudir a este servicio.

La buena realización de las ciudades del futuro.  Si hay algo bueno en esta película es la calidad de los efectos y locaciones con las cuales reproducen las hipotéticas ciudades del futuro, todo se veía muy realista.

Las escenas de acción.  Por cuenta de éstas, el espectador no se desconcentra en la película.

Los cameos acerca de El Vengador del Futuro original de 1990.  Me gustó sobre todo el de la mujer de los tres senos que orienta a Douglas Quaid hacia “Recuerdos”.  Esa escena no podía faltar.

El diseño de “La Caída”.  Me pareció un acierto el diseño de este sistema de transporte, el cual me pareció un elemento original.  Si mi memoria no me falla, creo que esto no tiene antecedentes en otras películas de ciencia ficción sobre la sociedad del futuro.  El hecho de que exista en el futuro una especie de ascensor gigantesco subterráneo, que atraviesa el interior de La Tierra en tan sólo 17 minutos me pareció alucinante.

La policía sintética federal.  El CGI para recrear a los androides que fungen como policías del futuro estuvo bien hecho.  Estos personajes ayudaron a que las escenas de acción fueran más interesantes, e incluso juegan un papel crucial en la parte final de la película.

El esfuerzo por parte del director y del equipo de producción para diferenciar la trama de esta película de la de su predecesora original.  He aquí las diferencias que ayudaron a que el argumento fuera menos predecible de lo que hubiera sido:

En la película de Paul Verhoeven de 1990, los hechos se desarrollan en La Tierra y en Marte, en la versión de Len Wiseman se desarrollan solamente en La Tierra, la cual quedó casi devastada por la guerra.

La resistencia es en la película de 1990 un grupo de mutantes de Marte que lucha por más libertad y más aire contra Cohaagen, quien tiene el monopolio de la explotación del turbinium en Marte.  En la versión actual, la resistencia es la gente de La Colonia, que lucha contra opresión política y económica de la FUB, cuyo canciller es Cohaagen.

En el clímax de la película de 1990, se descubre que hubo alienígenas hace 1 millón de años en Marte y que construyeron un gigantesco mecanismo para dotar a Marte de aire respirable.  Cohaagen sabe que esto es una amenaza para la comercialización del turbinium, por lo que al final trata de destruirlo.  En la versión de Len Wiseman, el plan de Cohaagen es el construir un gigantesco ejército de androides, para invadir La Colonia y destruirla, ocasionando otra sangrienta guerra.

LO QUE NO ME GUSTÓ

La sexy Kate Beckinsale, interpretando el papel de Lori, el cual ya había hecho Sharon Stone en la versión de 1990.  Después de fingir ser la esposa de Hauser, recibe la orden de Cohaagen de capturarlo, aunque ella excede estas directrices al tratar de matarlo durante toda la persecución, debido a celos profesionales.  

Si bien la trama tuvo ciertas diferencias claves de la versión de 1990, fue un poco aburrida y predecible, le faltó puntos de giro que generaran sorpresa en el espectador.  Además los personajes estaban como carentes de alma, eran muy planos, lo cual tampoco generó emoción.

De todas formas, vale la pena ver esta película para pasar un buen rato y recordar viejos tiempos de la cinematografía de ciencia ficción.