EL HOBBIT: LA DESOLACIÓN DE SMAUG. SINOPSIS CRÍTICA DE LA PELÍCULA

Finalmente pude ver la segunda parte de El Hobbit: ‘La Desolación de Smaug’.  Esta secuela es mucho mejor que su predecesora, ya que cuenta con una trama más elaborada y más y mejores escenas de acción.  Pero el show se lo roba el Dragón Smaug, no sólo por la sofisticación técnica involucrada en su creación, sino en su perfil sicológico, en su comportamiento como tal.  Y esto se debe a la excelente caracterización de Benedict Cumberbatch en su interpretación de este dragón.  Pero bueno, sin más preámbulos y tras el salto podrán encontrar la acostumbrada sinopsis crítica…

SINOPSIS CRÍTICA

Esta escultura señala y oculta a la vez el camino a la puerta de entrada secreta del Reino de Erebor, la cual sólo se puede ver con "la última luz del día de Durin".

‘La Desolación de Smaug’ es la secuela que necesitaba ‘El Hobbit’ para resarcir el poco esplendor de la primera parte, ya que se trata de una película que trae de vuelta la riqueza argumental, los efectos y la acción vistas en la pasada trilogía de El Señor de los Anillos.  Sin embargo, el show se lo roba Smaug, el codicioso y sicópata Dragón venido de las Montañas Grises al norte de la Tierra Media…

El argumento.

Resumen de la trama (con pocos spoilers): Después de que Bilbo, Gandalf, Thorin y compañía logran escapar de los trasgos de las Montañas Nubladas y de la emboscada de Azog, llegan a la casa de Beorn, quien les da refugio y comida.  Pero al llegar a los límites del Bosque Negro, Gandalf se ve obligado a separarse del grupo para dirigirse a la fortaleza de Dol Guldur y corroborar el regreso de Sauron, “El Señor Oscuro”, a quien intentará detener.  En tanto, tras ser capturados por el rey elfo Thranduil, Bilbo y la Compañía de Thorin logran escapar del territorio de los Elfos Silvanos, gracias al uso secreto que le da Bilbo al Anillo Único, consiguiendo llegar finalmente a Esgaroth, la Ciudad del Lago.  A pesar de la oposición de Bardo “El Arquero”, a la expedición de Thorin, por el peligro que implica despertar al dragón, Thorin logra convencer al Gobernador de Esgaroth para ganar su apoyo y así emprender el trayecto final hasta la Montaña Solitaria.   Pero Smaug no ha perdido su fuerza y defenderá su tesoro, manteniendo su empeño en acabar con el linaje de Durin y con todo vestigio de civilización alrededor de la montaña…

El rey elfo Thranduil (Lee Pace), soberano del reino de los Elfos Silvanos del Bosque Negro.  Se trata de un personaje oscuro, egoísta (sólo le preocupa la prosperidad de su reino a expensas de la Tierra Media) y poco ético, que anhela poseer unas gemas que se encuentran en la Montaña Solitaria.

A diferencia de un ‘Un Viaje Inesperado’, cuyo argumento se desarrollaba lentamente, el de la Desolación de Smaug transcurre mucho más rápido, obteniéndose una trama más vertiginosa y dinámica, con ciertos componentes oscuros que la hacen más interesante, sobre todo por la parte que tiene que ver con el enigmático rey elfo Thranduil y la travesía de Gandalf hacia Dol Guldur en busca de Sauron.  Se podría decir que la calidad argumental de esta segunda parte está casi a la altura de la trilogía de El Señor de los Anillos.

Los elementos estéticos.

Los efectos especiales mantienen el nivel de calidad de la película predecesora, a excepción de las escenas de Smaug en el interior de la Montaña Solitaria, en donde los efectos especiales exceden en mucho a lo que habíamos visto anteriormente.  El realismo con el que fue creado Smaug es en realidad descrestante.  Así mismo, la escenografía en donde se desenvuelve la acción, es decir, las arcas del tesoro del rey Thror, ha sido muy bien lograda y es impecable.

Los personajes.

Casi todos los personajes estaban bien interpretados, y en vista de que en la primera parte ya habían sido desarrollados, en esta película hay espacio para ver ejecutado todo su potencial.  Sin embargo, sobresalen dos personajes en particular: el rey elfo Thranduil (interpretado por Lee Pace) y el dragón Smaug (interpretado por Benedict Cumberbatch).   Thranduil es un soberano con una personalidad oscura y enigmática (algo poco común en un elfo), el cual por su egoísmo procura mantenerse al margen de los conflictos de la Tierra Media, y siempre pareciera que oculta malas intenciones.  En cuanto a Smaug, ha tenido una estupenda caracterización, se trata de una criatura astuta, cruel, codiciosa y sicópata; lo cual unido a la calidad técnica del CGI con el que se le da vida, convierten a este dragón en el verdadero protagonista de esta historia.

"Mis dientes son espadas, mis garras lanzas, mis alas un huracán y mi aliento muerte".  Con esta frase el dragón Smaug intimida a Bilbo dándole a entender su poderío.  Smaug ya sabe que Bilbo está en busca de la Piedra del Arca.

Conclusión.

‘La Desolación de Smaug’ tiene una trama más ágil y dinámica, lo que hace que la película transcurra más rápido que su predecesora, la cual a ratos se hacía eterna.  Y es en esta película que se empiezan a ver los elementos claves con los cuales se hace la cohesión con los eventos que tendrán lugar en ‘El Señor de los Anillos’, sesenta años después.

Calificación: 9/10.